lunes, 30 de marzo de 2009

México Tras Bambalinas

Los últimos años de guerra contra el narcotráfico en México han arrasado con todos los reflectores y conversaciones del ámbito político, mediático y social. Sin embargo, de vez en cuando es bueno mirar a nuestro país más allá de la primera plana y ver que está pasando tras bambalinas.

Estos últimos dos meses he tenido la gran oportunidad de estudiar con un grupo de lideres de once países de Latinoamérica, España y Portugal. A través de la convivencia diaria y de escuchar sus experiencias he logrado apreciar el gran país en el que vivimos. Muchos de mis compañeros provienen de Estados con gobiernos populistas y es increíble escuchar de primera mano lo que ha sucedido en países como Venezuela, Bolivia y Ecuador.

La fórmula ha sido muy parecida: el pueblo, cansado de lo mismo, elige democráticamente a un caudillo para la presidencia; éste, basándose en el poder "conferido" por el pueblo, desmantela el congreso como parte de un proceso de refundación del Estado, a través de la instauración de una Asamblea Constituyente, que legisla a su gusto, deshace la Corte Suprema, crea una nueva corte con jueces que le son fieles, y por último la Asamblea redacta una nueva Constitución que se va a referéndum, la cual, aprovechando la popularidad de los caudillos, es finalmente aprobada por el pueblo.

Al final de cuentas, con este nuevo esquema de Estado, tienes un país con 4 o 5 poderes (los tres típicos más un poder electoral y otro de participación ciudadana) los cuales son controlados por el “Presidente” que para suerte de todos, puede ser reelecto indefinidamente. Lo anterior, sumado a una fuente constante de ingresos (petróleo, gas natural o remesas del extranjero), una débil institucionalidad, una oposición dividida o inexistente, la nacionalización de las principales empresas, violaciones a los derechos humanos, y una prensa “auto-censurada”, crea un caldo de populismo puro, con un control absoluto del país.

Volviendo a nuestro México, hay algo que compartimos con nuestros hermanos de Venezuela, Bolivia, Ecuador y el resto de Latinoamérica: una gran sociedad civil y, principalmente, las ganas de querer hacer algo positivo por nuestros países. Lo que nos diferencia, es que estamos en un proceso de democratización, relativamente joven (9-15 años), lleno de avances significativos: instituciones que cumplen sus funciones, poderes que luchan constantemente por mantener su independencia, una oposición ordenada, ciudadanía participativa, un instituto electoral autónomo, libertad de prensa, alternancia en el poder y un sector privado independiente; en definitiva, las bases para un Estado de Derecho.

Queda mucho por hacer por México, a pesar de que en estos tiempos de inseguridad y crisis económica todo pueda ser confuso. Hay nuevos retos, pero el camino está trazado. En ocasiones, es bueno mirar hacia atrás, y a nuestros vecinos, para ver todo lo que hemos avanzado sin perder de vista el futuro.

3 comentarios:

  1. Pensamientos negativos traen resultados negativos!
    No nos nublemos con cosas negativas, porque como dice Patricio el camino esta claro pero con la mente nublada no lo vamos a poder ver.

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  2. Bien por Patricio, hoy mas que nunca debemos resaltar todo lo bueno de nuestro Mexico y no ciclarnos en lo malo.

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  3. Totalmente de acuerdo con Pato.

    El camino está claro, solo hace falta que nuestra sociedad aprenda el proceso de solución de problemas - no podemos empezar a solucionar nada sin primero aceptar que existe, y eso va para todos los níveles de sociedad mexicana. La honestidad y transparencia nos van a hacer ver lo feas que están las cosas en realidad, pero también nos ayudarán a solucionarlas de frente.

    Somos tan privilegiados en tantos ámbitos, que nos hemos vuelto cómodos, y eso es lo que nos ha llevado a dónde estamos ahora. Cosas que todos críticamos, pero que sin duda todos solapamos cuando combiene, como el "compadrísmo", actitudes "si nadie lo vé no está mal" y el no competir con uno mismo son actitudes que tienen que ir desapareciendo para que México crezca. Y no está "mal" per se...somos un país joven, y todavía estamos estirándonos y buscando identidad. Aseguremos de hacer nuestra parte para que México alcanze lo que todos sabemos que puede ser y no usemos nuestro proceso de desarrollo como escusa para no hacer las cosas.

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